martes, 25 de septiembre de 2007

Una vez mas se reunió la Cofradía (crónica de Sixta)...

Bendito seas señor!
Como en aquella película La Fiesta de Babette hubo de todo... pero de todo eh? porque haciendo gala de nuestros mejores rasgos interculturales, interaciales e intergeneracionales cada quien aportó lo suyo. No nombraré a los autores, cada quien se reconocerá en su plato:
De entrada, un Antipasto delicioso... pan árabe hasta para lanzar al techo,y una croquetas de esas que hacen recordar la comida de las abuelas. Después, un Tabule excelente, unas Papas que espero su autora nos cuente como hace esa cremita amarillita tan suave y deliciosa, otra ensalada exótica y audaz que combinaba sabores inauditos como el comino, el queso madurado y una uvas cortadas así, de lo mas bonitas, estaba fresquísima y también exquisita. Del pollo Tai, mejor ni hablar porque todavía estoy soñando con los efectos seductores que podría llegar a tener - por ejemplo- administrada junto a la ensalada de la uvitas... ( las recetas niñitas, por favor)
También hubo por allí un Atún de origen vasco que comenzó con un arrebato de picante pero terminó de lo mas sanito en la plancha, para evitar posteriores efectos perversos en las comensales... que el picante es sabroso pero hace estragos!!! Alguien preguntaba insistentemente por las Papas a la importancia, pero esas no llegaron porque son tan importantes que estaban muy ocupadas, de manera que hubo que darse durísimo con un Paloapique tan mestizo que mezclaba sin el menor complejo frijoles con aceitunas y una buena porción de pimienta negra...como debe ser la pimienta que se respete.
Al final los postres...mmmmmm una torta macrobiótica de zanahoria que todavía anoche disfrutábamos en la casa con café con leche, y otra con relleno de arequipe que nos hizo volver a nuestra infancia, y el cafecito que nos preparó la anfitriona que nos devolvió a las delicias de la adultez.
Pero el sabor mas sublime, intangible y etéreo de la tarde fue el del Ponche Crema Virtual... nos dejó tan embriagados que aún no sabemos si fue real o imaginario... pues como pueden ver, nuestra comida del sábado fue puro realismo mágico! Cosas buenas que aún suceden en esta tierra de gracia!
Cariños a tod@s
Sixta

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